Ya de vuelta. Ahora toca volver a la realidad, aunque más bien a la rutina, a la que habrá que buscarle un lado positivo... que no es otro que pensar en cuando llega el próximo parón.

Muy buenas vacaciones, y muy bien aprovechadas. Muchos kilómetros recorridos, y he de decir que ha merecido la pena cada uno de ellos. Desde Llanes a Ordesa, pasando por Salamanca, Zaragoza, Tenerife, Ibiza, Almería y Bilbao. Ha habido tiempo para ir la playa, a la montaña, salir de fiesta, quedarse durmiendo hasta tarde, hacer turismo consumista (shopping que lo llaman los yankis) y sobre todo pasar muchas horas sentadito viendo pasar paisajes por la ventanilla, o jugar con el GPS (mi querido TomTom) y ver como marca 925 km/h y una altitud de 10500 metros, mientras atraviesas los campos en el mapa a toda velocidad.

Muchas cosas para un sólo resumen, así que mejor ir desgranando poco a poco, aprovechando que llega septiembre con sus colecciones y sus fascículos.